La secretaria general del PP vive en Madrid, pero tiene su residencia oficial en Albacete
Martes, 24 de Noviembre 2009
El empadronamiento de la secretaria general del PP, presidenta regional de este partido en Castilla-La Mancha y senadora autonómica por esta Comunidad, María Dolores de Cospedal, es “irregular”, según el vicesecretario de Comunicación “popular”, Esteban González Pons, quien ha citado el articulo 54 de la ley de Población que dice que hay que empadronarse "donde se reside habitualmente o se pase más tiempo al año", apoyándose así en la sentencia de la Audiencia de Madrid que le da la razón frente a la demanda presentada por la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
"Hay que empadronarse donde se reside"
Pons lo tiene muy claro: se es de “donde se reside habitualmente o se pasa más tiempo al año”. Sin querer (o no) acaba de poner en un serio aprieto a su secretaria general, María Dolores de Cospedal o Cospedal, quien tiene fijada su residencia oficial en Albacete, por lo que cobra del Senado una indemnización de 1.800 euros, cuando está demostrado que vive y trabaja en Madrid y que dedica a Castilla-La Mancha “dos días a la semana”, según sus propias declaraciones realizadas a la revista Telva.
González Pons ofreció el domingo una rueda de prensa en Valencia para dar a conocer la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid que le da la razón frente a la demanda presentada contra él por María Teresa Fernández de la Vega, quien le acusaba de intromisión ilegítima en su derecho al honor por unas manifestaciones que el “cacerolero del Turia” realizó, el 5 de diciembre de 2007, calificando el empadronamiento de la vicepresidenta del Gobierno en la localidad valenciana de Beneixida como “irregular”.
El vicesecretario de Comunicación, que marca distancias cuando puede con De Cospedal, ha llegado aún más lejos al pedir a Fernández de la Vega " que regularice su empadronamiento" y que lo haga "en Madrid que es donde vive", sin caer (o no) en la cuenta que la número dos de su partido está en la misma situación, con una particularidad, que la vicepresidenta presta un servicio al Estado español y por lo tanto debe residir en la capital de España.
La torpeza verbal del “cacerolero” salpica también a otros miembros de su partido que, según su criterio y planteamientos, siempre refrendados por el artículo 54 de la Ley de Población, están empadronados de forma “irregular”.
Sólo en Castilla-La Mancha, región de “prestigiosos cuneros” del PP (Ana de Palacio, Isabel Tocino, Gustavo de Arístegui…), y por no dejar la hipotética tierra de María Dolores de Cospedal, se encuentran en esta situación el viceportavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados y parlamentario del PP por Toledo, Arturo García Tizón, empadronado en un despacho de abogados de la ciudad de las Tres Culturas cuando en realidad vive en Madrid; Luis Manuel Fraga, familia del presidente fundador del PP y senador por Cuenca, ciudad que ni siquiera conoce, o su compañero en la Cámara Alta y representante también por la ciudad de las Casas Colgadas, Francisco Utrera. Todos ellos viven en Madrid o en otras ciudades, pero cobran la indemnización de 1.800 euros por tener de “forma irregular” su residencia en Castilla-La Mancha, como cree acreditado Esteban González Pons en el citado artículo 54.
Carlos Iserte
Sois socialistas no para amar en silencio vuestras ideas ni para recrearos con su grandeza y con el espíritu de justicia que las anima, sino para llevarlas a todas partes
martes, 24 de noviembre de 2009
jueves, 19 de noviembre de 2009
"Reunión de verduleras"
REAL ACADEMIA ESPAÑOLA
DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA - Vigésima segunda edición
verdulero, ra.
1. m. y f. Persona que vende verduras.
2. f. coloq. Mujer descarada y ordinaria.
DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA - Vigésima segunda edición
verdulero, ra.
1. m. y f. Persona que vende verduras.
2. f. coloq. Mujer descarada y ordinaria.
miércoles, 4 de noviembre de 2009
Pobre Cospedal, una limosnita....
La portavoz del Grupo Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Ana Guarinos, que el pasado año pedía a José María Barreda que se "apretara el cinturón porque la gente está pasando apuros", en referencia al sueldo del presidente del Gobierno regional, a quien también exigía anular la subida de sueldos de los altos cargos, guarda ahora silencio tras saber que su jefa de filas, la cuestionada secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, gana el doble que todo un presidente autonómico.
Y que De Cospedal, a pesar "de los apuros de la gente", como matizaba Guarinos, cobra dos sueldos. Así, como suena: una nómina por el Senado, otra por el PP y una asignación del Ministerio de Justicia por su cara bonita. Pero, además, la polémica presidenta del PP de Castilla-La Mancha, Comunidad que visita un día y medio a la semana, percibe también un suplemento en las Cortes regionales de algo más de dos millones de pesetas y otro suplemento del Senado de 27.608,834 euros. O lo que es lo mismo, a todos los españoles De Cospedal nos cuesta la friolera de 165.651,65 euros, o si lo prefieren, más de 27.000.000 de pesetas. ¿No está mal la paga?
Y eso, a pesar de que Ana Guarinos consideraba el 28 de enero de 2008, que la subida salarial de Barreda era "desproporcionada, abusiva e inmoral", sobre todo en relación al periodo de recesión económica que vivía el país y "especialmente Castilla-La Mancha", añadía Guarinos, "se va a dar la curiosa paradoja de que Castilla-La Mancha es la tercera región más pobre de España y Barreda va a ser el segundo presidente que más cobre en el país". Una falsedad más de la diputada alcarreña. La retribución de Barreda está por debajo de la media de los presidentes autonómicos.
Por lo tanto María Dolores de Cospedal ganó más del doble de lo que ganó el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda (80.031), y muy por encima de los ingresos del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero (91.982 euros anuales).
¿Qué dirá hoy la señora Guarinos? ¿Dirá también que el sueldo de Barreda es "impropio de un buen gobernante"? Ana Guarinos también sabe que su venerada “lideresa” no tiene ninguna deuda declarada y que en sus cuentas bancarias, ninguna de ellas en Caja Castilla-La Mancha, tiene la friolera de 417.069 euros; 70 millones de las difuntas pesetas. Y eso, con las necesidades "que hay en la región", como exclamaría Guarinos. Por la boca muere el pez.
En fin, que María Dolores de Cospedal es rica; es multimillonaria, y que su patrimonio, sumado al de su marido, el siempre inquietante Ignacio López del Hierro, supera con creces, o quintuplica, a los bienes de cualquier diputado regional que sí trabajan por Castilla-La Mancha y que “los sabuesos” de De Cospedal ponen diariamente en su disparadero.
Estoy de acuerdo con Ana Guarinos. Es indecente que el sueldo de un trabajador no llegue a los mil euros, mientras que De Cospedal se embolsa cada 30 días casi 14.000 euros (dos millones largos de pesetas). Es indecente que la senadora, diputada regional, presidenta de los "populares" castellano-manchegos y secretaria general del PP cobre más que el presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Carlos Dívar (146.000) o que la presidenta del Tribunal Constitucional, Emilia Casas, con la misma retribución que Dívar. Sí, es verdad, es indecente.
Carlos Iserte
Y que De Cospedal, a pesar "de los apuros de la gente", como matizaba Guarinos, cobra dos sueldos. Así, como suena: una nómina por el Senado, otra por el PP y una asignación del Ministerio de Justicia por su cara bonita. Pero, además, la polémica presidenta del PP de Castilla-La Mancha, Comunidad que visita un día y medio a la semana, percibe también un suplemento en las Cortes regionales de algo más de dos millones de pesetas y otro suplemento del Senado de 27.608,834 euros. O lo que es lo mismo, a todos los españoles De Cospedal nos cuesta la friolera de 165.651,65 euros, o si lo prefieren, más de 27.000.000 de pesetas. ¿No está mal la paga?
Y eso, a pesar de que Ana Guarinos consideraba el 28 de enero de 2008, que la subida salarial de Barreda era "desproporcionada, abusiva e inmoral", sobre todo en relación al periodo de recesión económica que vivía el país y "especialmente Castilla-La Mancha", añadía Guarinos, "se va a dar la curiosa paradoja de que Castilla-La Mancha es la tercera región más pobre de España y Barreda va a ser el segundo presidente que más cobre en el país". Una falsedad más de la diputada alcarreña. La retribución de Barreda está por debajo de la media de los presidentes autonómicos.
Por lo tanto María Dolores de Cospedal ganó más del doble de lo que ganó el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda (80.031), y muy por encima de los ingresos del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero (91.982 euros anuales).
¿Qué dirá hoy la señora Guarinos? ¿Dirá también que el sueldo de Barreda es "impropio de un buen gobernante"? Ana Guarinos también sabe que su venerada “lideresa” no tiene ninguna deuda declarada y que en sus cuentas bancarias, ninguna de ellas en Caja Castilla-La Mancha, tiene la friolera de 417.069 euros; 70 millones de las difuntas pesetas. Y eso, con las necesidades "que hay en la región", como exclamaría Guarinos. Por la boca muere el pez.
En fin, que María Dolores de Cospedal es rica; es multimillonaria, y que su patrimonio, sumado al de su marido, el siempre inquietante Ignacio López del Hierro, supera con creces, o quintuplica, a los bienes de cualquier diputado regional que sí trabajan por Castilla-La Mancha y que “los sabuesos” de De Cospedal ponen diariamente en su disparadero.
Estoy de acuerdo con Ana Guarinos. Es indecente que el sueldo de un trabajador no llegue a los mil euros, mientras que De Cospedal se embolsa cada 30 días casi 14.000 euros (dos millones largos de pesetas). Es indecente que la senadora, diputada regional, presidenta de los "populares" castellano-manchegos y secretaria general del PP cobre más que el presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Carlos Dívar (146.000) o que la presidenta del Tribunal Constitucional, Emilia Casas, con la misma retribución que Dívar. Sí, es verdad, es indecente.
Carlos Iserte
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